El mundo del flamenco está lleno de pasión, talento y una rica tradición que se ha transmitido de generación en generación. Entre los exponentes más destacados se encuentra Susana Lupiáñez Pinto, conocida artísticamente como La Lupi. Esta bailaora y coreógrafa malagueña ha dejado una huella imborrable en el arte flamenco, no solo por su técnica, sino también por su profunda conexión emocional con el público y su deseo constante de aprender y evolucionar en su arte.
La trayectoria de La Lupi en el flamenco
Desde su nacimiento en Málaga en 1971, La Lupi ha estado rodeada de un ambiente flamenco que ha moldeado su carrera. A lo largo de los años, se ha convertido en una de las figuras más influyentes en el ámbito del baile flamenco, destacando por su estilo único y su habilidad para conectar con los espectadores en cada actuación.
La Lupi ha desarrollado una carrera multifacética como bailaora, coreógrafa y docente, lo que la ha llevado a ser reconocida en todo el mundo. Sus espectáculos no solo son eventos artísticos, sino experiencias que invitan a la reflexión y la emoción. Entre sus actividades más recientes se encuentra su participación en la residencia artística In-Progress, donde se encuentra trabajando en su última obra, Lo inédito.
Experiencia en residencias artísticas
La experiencia de La Lupi en la residencia de Flamenco Festival junto al Ayuntamiento de Torrox ha sido un momento significativo en su carrera. Este espacio le ha permitido explorar su creatividad de forma intensa y colaborativa.
Durante su tiempo en la residencia, La Lupi ha destacado la importancia de la convivencia y el intercambio de ideas entre artistas. “Es un proceso apasionante, pues estamos constantemente intercambiando ideas, aportando al espectáculo, desarrollando el arte día y noche. ¡No nos queremos ir!”, comparte con entusiasmo.
El proceso creativo detrás de «Lo inédito»
La obra Lo inédito es el resultado de años de reflexión y creación. La Lupi expresa que su inspiración proviene de su propia vida y experiencias en el escenario. Para ella, el arte flamenco es una forma de explorar emociones y vivencias, tanto de penurias como de felicidad.
“Todo lo que te puedes encontrar cuando te expones encima de un escenario, a veces el público no es ni medio consciente. Cómo un artista sale del paso ante cualquier adversidad”, explica. Esta obra promete ser una introspección a su vida, donde se abren las puertas a sus miedos y esperanzas.
Colaboraciones clave en su carrera
La Lupi ha trabajado con varios artistas a lo largo de su carrera, pero en esta ocasión se siente especialmente emocionada por colaborar con el director Alfredo Velasco. “Ha hecho una gran labor de patronaje y costura, uniendo una serie de escenas que han dado un resultado muy bonito”, afirma.
Esta colaboración no solo enriquece el espectáculo, sino que también permite a La Lupi explorar nuevas facetas de su arte. Para ella, cada nueva experiencia es una oportunidad de aprendizaje, un enfoque que ha mantenido a lo largo de su carrera.
La conexión con Alfredo Tejada
En el ámbito musical, La Lupi ha trabajado a menudo con el cantaor Alfredo Tejada, a quien considera su cantaor fetiche. La conexión que tienen es palpable, lo que se traduce en actuaciones donde el público puede sentir la magia entre ellos.
- La admiración mutua entre La Lupi y Tejada es un factor clave en su colaboración.
- Ambos han desarrollado una química especial que enriquece cada actuación.
- Tejada aporta una voz que resuena con la esencia del baile de La Lupi.
“Es que cuando Alfredo me canta y yo bailo, creo que llego al clímax”, dice La Lupi, reflejando la profunda conexión que comparten.
Una mirada hacia el futuro: la enseñanza y la evolución
La Lupi no solo se destaca en el escenario; también es una reconocida docente en el mundo del flamenco. Su enfoque pedagógico se basa en la pasión por el arte y la necesidad de transmitir ese amor a sus alumnos.
“Yo me entrego, me dejo la piel, porque no mido y soy insaciable. He aprendido mucho enseñando”, comenta sobre su experiencia como instructora. La satisfacción que siente al ver a sus estudiantes crecer es uno de los mayores logros de su carrera.
Reflexiones sobre la evolución del flamenco
La Lupi también reflexiona sobre el panorama actual del flamenco y cómo ha cambiado con el tiempo. Ella reconoce que, aunque hay un alto nivel técnico entre los jóvenes artistas, la conexión personal y las experiencias directas con los maestros son igualmente cruciales.
“Las generaciones de ahora tienen todo a mano, una información muy valiosa que antes no teníamos. Pero claro, todo tiene su contrapunto”, señala, enfatizando la importancia de equilibrar la técnica con la experiencia vivencial.
La influencia de Málaga en su arte
La Lupi lleva a Málaga en su corazón y en su arte. Su tierra natal es un constante referente en su trabajo, un leit motiv que se traduce en sus coreografías y en su forma de conectarse con el público.
Esta conexión con su tierra se manifiesta en pequeñas referencias que incluyen bailes tradicionales como los verdiales, que ella ha reivindicado en su obra. “Soy muy ‘malaguita’, muy de mi tierra”, afirma, reflejando su orgullo cultural.
El legado de La Lupi en el flamenco
A lo largo de su carrera, La Lupi ha abierto puertas a muchos artistas emergentes en el flamenco, creando un espacio para que desarrollen su talento. “Cuando yo tenía 27 años y llegué a Málaga desde Madrid, aquí había artistas jóvenes con talento. Vi claro que tenía que darles la oportunidad de que se les viera en un escenario”, comparte, mostrando su compromiso con el crecimiento del arte flamenco.
La Lupi ha demostrado que el flamenco no solo es una forma de arte, sino una comunidad donde los artistas se apoyan mutuamente. Su legado continuará inspirando a nuevas generaciones a seguir sus pasos y a explorar la riqueza del flamenco en todas sus dimensiones.

























