El mundo del flamenco es un universo vibrante y en constante evolución, donde las tradiciones se entrelazan con la innovación. En este contexto, el documental Rito, del cineasta Emilio Belmonte, emerge como una obra crucial que pone de relieve la figura de Tomás de Perrate, un cantaor que representa tanto el legado familiar como la búsqueda de nuevas fronteras artísticas. Este documental no solo es una biografía, sino una exploración profunda de un artista que desafía las normas del flamenco contemporáneo.
El legado de Tomás de Perrate en el flamenco
Tomás de Perrate, originario de Utrera, es un representante notable de una de las familias más influyentes en la tradición flamenca. Su apodo, heredado de su padre, Perrate de Utrera, no solo es un símbolo de su linaje, sino también un recordatorio del peso de la herencia cultural que lleva consigo. A pesar de ser parte de esta saga, Perrate no comenzó su carrera profesional en el flamenco hasta después de los 40 años, lo que añade una dimensión única a su trayectoria.
Antes de dedicarse plenamente al canto, Perrate administró una peluquería de señoras durante más de veinte años. Esta experiencia, lejos de ser un obstáculo, le proporcionó una perspectiva única sobre la vida y el arte, aspectos que se reflejan en su música. Su camino hacia el flamenco es un ejemplo de cómo las trayectorias no siempre son lineales y pueden estar marcadas por giros inesperados.
El enfoque del documental ‘Rito’
Rito no es simplemente un retrato de la vida de Tomás de Perrate; es una meditación sobre el flamenco en su forma más pura y evolutiva. A través de su lente, Emilio Belmonte captura la esencia de un arte que se reinventa constantemente, fusionando lo tradicional con lo contemporáneo. La película se desarrolla en escenarios icónicos de Sevilla, Barcelona y el sur de Francia, lo que subraya la universalidad del flamenco.
Uno de los aspectos más destacados del documental es su capacidad para mostrar cómo Perrate se involucra con músicos de vanguardia y compañías de danza contemporánea. Estas colaboraciones reflejan un deseo de romper barreras y explorar nuevas dimensiones del arte flamenco. Por ejemplo, su trabajo con el grupo de rock Za! y su participación en producciones de danza contemporánea revelan un cantaor que no teme experimentar.
La trilogía flamenca de Emilio Belmonte
Con Rito, Belmonte culmina una trilogía que incluye Impulso y Trance, donde también ha explorado las vidas y carreras de otras figuras significativas del flamenco como Rocío Molina y Jorge Pardo. Cada una de estas películas busca ofrecer una visión fresca y auténtica del flamenco, destacando su relevancia en el mundo moderno.
La trilogía se caracteriza por su enfoque en el flamenco como un arte que trasciende fronteras, tanto geográficas como estilísticas. Belmonte ha logrado documentar el proceso de transformación y adaptación de estos artistas, dejando un legado audiovisual que celebra la riqueza y diversidad del flamenco contemporáneo.
El flamenco como arte en evolución
El flamenco, tradicionalmente asociado a las raíces culturales de Andalucía, ha evolucionado con el tiempo, adoptando influencias de otros géneros musicales y formas de arte. En Rito, se plantea una reflexión sobre cómo el flamenco puede ser un vehículo para la experimentación. La fusión con el rock, la electrónica y el ballet contemporáneo es un testimonio de la versatilidad del flamenco y su capacidad para adaptarse a los tiempos modernos.
Perrate ha expresado en varias ocasiones su admiración por la capacidad del flamenco para reinventarse. «El flamenco siempre ha sido permeable. Está hecho para fusionarse, para reinventarse», afirma, evidenciando su compromiso con un arte que respeta sus raíces mientras busca un futuro vibrante.
Un documental de alcance internacional
La producción de Rito fue un proceso de seis años, resultado de la colaboración entre La Pepa Films, Mallerich Films – Paco Poch y la compañía francesa Hapax. Este esfuerzo conjunto no solo demuestra la dedicación detrás del proyecto, sino también su ambición de llevar el flamenco a un público global. El documental se presentó en Barcelona y El Hospitalet, y su culminación en el prestigioso Festival de Músicas del Mundo de Arlés en Francia resalta su carácter internacional.
La película no solo se centra en la figura de Perrate, sino que también actúa como un puente cultural, acercando el flamenco a nuevas audiencias. La grabación de un concierto en El Hospitalet junto a Za! es un claro ejemplo de cómo el documental busca capturar la esencia de la música en vivo y la interacción entre diferentes estilos.
El impacto de ‘Rito’ en la comunidad flamenca
La presentación de Rito no solo representa un hito en la carrera de Tomás de Perrate, sino que también tiene implicaciones más amplias para la comunidad flamenca. Este documental invita a los espectadores a reconsiderar sus percepciones sobre el flamenco y su evolución. Al mostrar a un cantaor que se encuentra en la cúspide de su creatividad a los 61 años, se desafían las nociones tradicionales de cuándo y cómo se puede ser relevante en el mundo del arte.
La obra de Belmonte sirve como un recordatorio de la importancia de la innovación y la experimentación en el flamenco. En un momento en que las tradiciones son a menudo vistas como inmutables, Rito ofrece una perspectiva refrescante sobre cómo el arte puede continuar evolucionando sin perder su esencia.

























